Las confituras siempre suelen ser buenas opciones cuando tienes una buena cantidad de fruta a punto de pasarse, ya sean en compota o mermeladas, es una forma de conservar la fruta durante más de tiempo y al final si las haces en casa son mucho mas saludables, ya que están libres de conservantes, colorantes e incluso las puedes preparar con edulcorantes y hacerlas un tanto más light.
El otro día mi suegra trajo a casa 15 kilos de ciruelas amarillas 100% ecológicas de la finca de una amiga, como resultado de una cosecha muy abundante, la cocina estaba a tope de ciruelas y estaban tan maduras que casi no se podían ni pelar, se me deshacían en las manos y pingaban todo!
No tengo idea de que tipo de ciruelas son, pero su sabor es bastante dulce y muy agradable, seleccionamos las más maduras y preparamos con ellas una compota deliciosa ideal para tomar con yogur natural, en las tostadas del desayuno, para rellenar crepes (frixuelos), etc, etc… en fin, a continuación te explico como prepararla 100% casera y sin gluten.
Receta de compota de ciruelas (sin gluten)
Ingredientes (500 gr aprox)
- 800 gr de ciruelas (yo usé de las amarillas)
- 200 gr de azúcar blanca
- 1 cucharadita de zumo de limón (opcional)
- 3 anises estrellados (opcional)
Preparación:
Lava y pela las ciruelas, en mi caso he usado ciruelas amarillas pero pueden valer de cualquier tipo; retira la pulpa y ponla a cocer junto con el azúcar y los anises durante unos 20 minutos, verás como poco a poco van soltando todo el líquido.
Para añadir un puntito de acidez añadí una cucharadita de zumo de limón, pero para el caso mis ciruelas estaban bastante dulces, así que esto dependerá del tipo de ciruelas que uses. Transcurridos 10 minutos más retira del fuego, retira los anises y pasa por la licuadora, aunque si lo prefieres puedes dejar los trozos de fruta.
Deja que reduzca hasta que tome consistencia más densa, dependiendo de cuanto líquido hayan soltado puedes tardar unos 15 o 20 minutos más. Conservala en un frasco de cristal esterilizado y de esta manera puede llegar a durar en la nevera hasta 2 meses, pero vamos, a nosotros nos ha durado a penas 1 semana porque está más buenaaaa 😛
Estoy pensando en ir a visitar de nuevo a mi suegra y ayudarle a rematar el botín que buena falta le hace 😉