Debo reconocer que hoy en día hay muchas más opciones para elaborar pan sin gluten, a lo largo de mi corta experiencia como celíaca (4 años casi) me he dado cuenta que existen muchísimas alternativas al gluten; sin embargo yo sigo siendo muy dependiente de los preparados panificables.
La verdad, utilizar las harinas preparadas sin gluten siempre nos facilita el trabajo sobretodo a los más novatos en cuanto al tema, es una pena que no todo el mundo tenga disponibilidad. En fin, si andas buscando una receta fácil para elaborar tu propio pan sin gluten te digo desde ya que has llegado al sitio indicado 😉
Receta de pan con tomate y aceitunas (sin gluten)
Ingredientes:
- 300 gr de harina panificable sin gluten (yo usé marca PROCELI)
- 200 ml de agua templada
- 80 ml de aceite de oliva
- 75 gr de aceitunas verdes sin hueso o rellenas
- 40 gr de tomate seco (secado al sol, no en aceite)
- 25 gr de levadura fresca (marca LEVITAL – sin gluten)
- 2 huevos grandes
- 1 cucharada de azúcar
- pizca de sal
Para el acabado:
- Pimentón dulce al gusto
- sal gorda al gusto
Preparación:
Empieza por hidratar la levadura fresca de panadería (marca LEVITAL – sin gluten) en agua templada con azúcar y deja en reposo durante unos 15 minutos hasta que fermente.
En otro cuenco mezcla la harina sin gluten (yo usé PROCELI) junto con el aceite, los huevos, la pizca de sal y cuando haya transcurrido el tiempo de fermentación agrega la levadura hidratada y amasa vigorosamente añadiendo el resto del agua templada poco a poco.
Puedes amasar a mano o ayudarte de un robot amasador, lo importante es amasar lo suficiente como para obtener una masa homogénea y sin grumos. Corta el tomate y las aceitunas en trocitos pequeños e incorpóralo a la masa, continúa amasando ligeramente para distribuir bien.
Este tipo de masa puede resultarte bastante pingosa, por lo que es complicado moldear directamente con las manos por lo que yo lo vuelco directamente en un molde de horneado. A pesar de parecer una masa inmanejable debo decirte que el resultado es bastante bueno ya que genera corteza crujiente y buena miga.
Colocada en el molde espolovorea pimientón dulce por toda su superficie y cubre con papel film, deja que repose durante media hora en un sitio cálido y cerrado, por ejemplo dentro del horno apagado, verás como durante ese lapso de tiempo duplica o triplica su volumen.
Hornea durante 1 hora a 200 grados (horno precalentado), verás como a los 30 minutos ha cogido bastante color, así que para evitar que se queme de más coloca una hoja de papel plata (papel aluminio) por encima.
Una vez horneado retira y deja que enfríe bien antes de cortar, tenlo presente; como estaba muy ansiosa por ver el corte yo me he anticipado un poco y se me ha deformado un poco
Puedes tomarlo solo, para acompañar las comidas o untado con un poco de aceite para tomar en el desayuno, de cualquier manera te aseguro que te encantará.
Se conserva bien únicamente envolviéndolo con un paño de tela, cuando pasen 2 días es probable que no esté igual de fresco pero puedes tostarlo en el horno y verás como gana incluso más que antes 😛
Señor pan el que me ha salido… poco a poco vamos acercándonos al objetivo de conseguir el pan sin gluten «perfecto».