Las legumbres en lo personal no es de mis comidas preferidas, ni aún en invierno que es cuando más se suelen tomar; no soy mucho de platos de cuchara; sin embargo, es importante tomarlas para mantener una buena alimentación balanceada.
Una forma distinta y mucho más apetecible (al menos para mí) es en ensalada, en principio no me parecía tan apetecible pero la verdad es que una vez que la pruebas te das cuenta que merece la pena repetir, es muy fácil de preparar y además muy contundente, tanto así que la puedes tomar como plato único.
Receta de ensalada de garbanzos y ventresca
Ingredientes (2 raciones muy generosas)
- 400 gr de garbanzos cocidos (pueden ser de bote, no contienen gluten)
- 8 pimientos rojos en conserva (yo he usado pimiento de piquillo)
- 1 cebolla pequeña picada muy fina
- sal al gusto
- aceite de oliva virgen
- crema de vinagre balsámico de módena (la marca Merry pone etiqueta sin gluten)
- aceite para freír
Preparación:
Corta la cebolla en tiritas muy finas y saltea en un poco de aceite hasta que se note tierna. Escurre los garbanzos cocidos, junto con el pimiento rojo cortado en tiras y añade sal al gusto. Cocina durante unos minutos, retira y deja templar.
Al momento de emplatar, coloca por encima de los garbanzos unos trozos de ventresca y escurre un poco de aceite de oliva virgen extra y crema de vinagre de módena para darle un toque más intenso de sabor. Puedes tomarla fría o templada.
¿Te animas a tomarla? 😉