La semana que viene voy a cumplir 4 años de vivir en España, 4 años de haber partido del terruño y de haber comenzado una nueva etapa en mi vida. En principio no puedo quejarme de nada pues el cariño de todas las personas que me rodean hace que compense las cosas que he dejado atrás.
Sin embargo para mantener vivas las tradiciones, hoy he querido desayunar con un buen trozo de semita salvadoreña que he preparado yo misma en versión sin gluten, ha quedado tal cual la recuerdo. La receta la tienes a continuación.
Receta de semita salvadoreña (sin gluten)
Ingredientes:
- 150 gr de harina panificable sin gluten (yo usé marca PROCELI)
- 150 gr de harina de repostería sin gluten (yo usé Schar Mix C)
- 150 gr de azúcar blanca + 4 cucharadas para espolvorear
- 150 gr de mantequilla reblandecida
- 3 huevos
- 2 cucharada de levadura seca de acción rápida (la marca MAIZENA es libre de gluten)
- mermelada de piña (la marca «La vieja fábrica» pone etiqueta sin gluten)
Preparación:
Mezcla las harinas (PROCELI y Schar Mix C – ambas sin gluten), agrega la levadura seca de acción rápida (la marca MAIZENA es apta para celíacos), ésta levadura tiene el mismo efecto que la levadura de panadería la única diferencia es que no hace falta hidratarla previamente.
Añade la mantequilla reblandecida, los huevos y el azúcar, y mezcla hasta formar una bola compacta que no se quede pegada en las manos; yo he usado un robot amasador, la señal que está hecha es que se desprende sola de las paredes del cuenco.
Deja reposar la masa durante al menos unas 2 horas en un sitio cálido y cerrado, por ejemplo el horno apagado. Si quieres que leve mejor puedes ayudarle precalentando el horno unos 10 minutos, apágalo y deja que salga el exceso de calor; introduce la masa tapada con un paño o papel film y verás como rápidamente dobla su volumen.
Levada la masa corta en 2 mitades iguales, y extiende cada una sobre la mesa de trabajo o encimera, corta ambas en forma rectangular de las mismas dimensiones retirando los bordes sobrantes (que luego utilizaremos).
Coloca mermelada de piña por toda la superficie de uno de los rectángulos generosamente, y coloca el otro rectángulo por encima presionando ligeramente con las yemas de los dedos para que quede fijo. Hay otras versiones que llevan dulce de panela pero suelen ser más empalagosas (para que lo diga yo… imagina! 😛 ), a mi me gusta mas la de piña.
De los restos de masa sobrante forma tiritas y colócalas a modo de rejilla por encima como decoración, y espolvorea abundante azúcar granulada (de la del café).
Hornea a 180 grados durante unos 35 a 40 minutos (horno precalentado), notarás que se va poniendo muy morena y tostadita por encima, retira del horno y deja enfriar a temperatura ambiente.
Que bien hemos desayunado, por un momento me he tele-transportado a casa de mis padres 😀
¿Te animas a intentarlo?