Mañana a estas horas ya no estaré por aquí, seguramente me encuentre en medio del océano; aunque las despedidas siempre suelen ser muy tristes, pero mi mamita esta vez se ha encargado de darle un poco de dulzura. Me voy con el recuerdo de su carita de alegría al sacar el bizcocho más bueno que nos ha preparado.
La receta evidentemente es con harina sin gluten; todavía del paquete de harina que traje desde casa (me ajustó a la perfección!); y como ha quedado tan bien pues he intentado escribirla en onzas ya que mi madre se lía mucho con los gramos, por si en un futuro la vuelve a preparar.
Me gustaría poder depender menos de los preparados especiales sin gluten, pero la verdad me he mal acostumbrado a ellas, un día intentaré hacer bizcochos sin mixes y cuando tenga una receta que me haya resultado bien ten por seguro que estará por aquí. De momento aquí te comparto esta receta.
Receta de bizcocho de coco y piña (sin gluten)
Ingredientes:
- 3 huevos
- 2 yogures naturales
- 8 oz de harina (en mi caso sin gluten Schar Mix Dolci)
- 4 oz de aceite vegetal o 1/2 barra de mantequilla
- 4 oz de azúcar moreno
- 1 cucharada de vainilla
- 2 cucharadas de bicarbonato sódico
- 4 oz de coco rallado
- 6 rebanadas de piña en conserva cortadas en daditos
Para decorar:
- 2 cucharadas de coco rallado
- 1 cereza
Preparación:
Empieza por mezclar los ingredientes húmedos: huevos, yogur, aceite (o mantequilla), la esencia de vainilla y el azúcar moreno; remueve hasta que se forme una crema lisa y homogénea. Puedes ayudarte de varillas de cocina o batidora eléctrica para hacerlo más fácil.
En otro bol tamiza juntas la harina y el bicarbonato sódico; en mi caso como comentaba es harina sin gluten que traje de casa; sin embargo pienso que la mezcla de 75% de arroz y 25% de maizena podría dar buen resultado, sin embargo tendré que probar para confirmarlo.
Formada la crema agrega el coco rallado y la piña cortada en cubitos medianos y remueve con una cuchara para repartir los trocitos de manera uniforme; he querido usar piña en almíbar pues así tiene menos acidez que la piña al natural, además que soltará menos jugos.
Engrasa el molde y vuelca la mezcla en el, si tienes de silicona es mejor pues aunque no lo engrases no se pega, a mi madre le traje uno muy bonito y se ha quedado encantadísima con el!!
Hornea a 170 grados (horno precalentado) durante unos 50 minutos, o hasta que se vea dorado por encima; como cada horno es distinto lo mejor es comprobar si está hecho insertando un palillo de madera por el centro, si sale completamente seco retira y deja que se temple un poco antes de desmoldar.
Para decorarlo únicamente espolvorea coco rallado por encima y coloca una cereza por el centro, así se mirará más vistoso.
Pues nada, me pongo a hacer las maletas…. me despido de agosto, de El Salvador, de mi familia y amigos; pero regreso feliz porque nos lo pasamos genial!! se que tarde o temprano volveremos a vernos.
Echaré de menos a mamita, ya me había acostumbrado otra vez a sus mimos 😛