El postre que a continuación te voy a explicar es sumamente sencillo pero muy exquisito, ideal para coronar una copiosa comida ya que resulta muy ligero y deja un sabor de boca del cual no te quieres olvidar: cerezas al marsala, sin gluten y sin lactosa 🙂
Receta de postre de cerezas al marsala (sin gluten – sin lactosa)
Ingredientes (para unas 8 raciones):
- 500 gr de cerezas frescas y sin hueso
- 100 ml de vino dulce marsala
- 100 ml de agua
- 50 gr de azúcar glacé
- ralladura de un limón
- canela en rama
- nata montada o yogur natural (yo usé nata montada de la marca «Friocrem» que es sin gluten y sin lactosa)
Preparación:
Lava y deshuesa las cerezas, puedes hacerlo con herramientas especiales para ello (son parecidos a los deshuesadores de aceitunas) o con mucha paciencia cortando por mitad con un cuchillo y retirando la pepita, que es como yo lo he hecho.
Pon a calentar el azúcar, la ralladura de limón, el agua y el marsala, añade además una ramita de canela y deja que llegue a ebullición removiendo ocasionalmente para que el azúcar se diluya. A continuación
Coloca una olla a fuego medio y pon en ella el azúcar, la ralladura de un limón, el agua y el marsala, añade una ramita de canela y deja cocinar removiendo ocasionalmente hasta que entre en ebullición.
Tengo que decir que nunca antes había probado el marsala pero una vez que lo hice he quedado muy enganchada, es buenísimo, ésta botella fue regalo de mi cuñada y la tenía guardada de hace tiempos en el armario.
Cuando empiece a hervir, retira la ramita de canela y agrega las cerezas deshuesadas, reduce la intensidad del fuego, tapa la olla y cocina durante unos 10 minutos para que las cerezas se ablanden un poco y cojan todo el sabor.
Posteriormente, retira las cerezas, incrementa nuevamente la temperatura y reduce el almíbar hasta que quede un poco más denso. Retira del fuego, incorpora nuevamente las cerezas y deja que todo se enfríe completamente antes de servir. Conservalo en la nevera durante al menos unas 4 horas.
Reparte las cerezas en los cuencos o vasitos donde vas a servir, acompaña con yogur natural o nata montada (la que yo usé es de la marca Friocrem, es sin lactosa) y decora con unas hojitas de menta, el toque verde nunca debe faltar 😉
Y ya tienes un postre de 10 que todo el mundo querrá repetir!