Si al igual que yo eres fan de las castañas, sabrás lo engorroso que es pelarlas cuando las haces tu misma en casa; pues nada, olvídate de dejarte las uñas porque hoy te cuento un sencillo truco muy básico que tienes que saber, enseguida te lo cuento.
En una olla pon abundante agua en función a la cantidad de castañas, pon a calentar a fuego medio y cuando empiecen a notarse burbujitas en el agua agrega las castañas, a las que previamente deberás haber hecho una pequeña fisura utilizando un cuchillo. La idea es que según se van cociendo el agua ablande la cascarilla que tienen por dentro facilitándonos la engorrosa tarea de pelarlas.
Dependiendo del uso que decidas darles así será el tiempo de cocción; por ejemplo si las vas a hornear o asar, vale con cocerlas unos 10 minutos; pero si lo que quieres es molerlas para hacer harina (es muy buena para hacer panes) deberás cocerlas de 20 a 30 minutos según el tamaño que tengan, verás que fácil se pelan en ambos casos.
Espero te haya sido de utilidad el truquillo, ahora a disfrutar de los frutos de otoño 😉