Antes de vivir en Asturias recuerdo que para mí el arroz con leche era un postre que pasaba desapercibido, mi madre lo solía preparar muy de vez en cuando y la verdad es que no me daba más. Pero desde que probé la versión asturiana me aficioné tanto que creo no ser capaz de volver a probarlo de otra manera.
Mi suegra lo suele preparar muy a menudo y a todos nos encanta, normalmente no es algo que contenga gluten, pero como sabe que tengo problemas también con los lácteos lo suele preparar con leche sin lactosa… como me consiente!, en fin, hoy le cedo el protagonismo a mi suegra y te comparto su receta.
Receta de arroz con leche asturiano (sin gluten y sin lactosa)
Ingredientes (6 tarrinas aprox)
- 1 litro de leche (puede ser desnatada)
- 150 gr de arroz
- 100 gr de azúcar granulada + 50 gr más para decorar
- 1 copita de coñac (opcional)
- corteza de limón
- canela en rama
Preparación:
Es mucho más fácil de preparar si tienes la Thermomix pues así te desentiendes completamente, mi suegra lo suele preparar así pero si no la tienes también puedes prepararlo; intentaré explicarlo de ambas maneras.
Si lo haces manualmente, pon a cocer a fuego medio la leche junto con la corteza de limón y la canela (al gusto), cuando empiece a hervir añade el arroz (el más ideal quizá sea el tipo bomba), remueve constantemente hasta que se forme una crema espesa y seca, más o menos tardarás uos 40-50 minutos.
Si usas la Thermomix, añade todo junto y programa velocidad 1 durante 50 minutos y olvídate del tema mientras tanto.
Obtenida la crema espesa añadirás los 100 gr de azúcar, continúa cocinando otros 5 minutos más a fuego muy bajito removiendo constantemente. Por último añade la copita de coñac, cocina y remueve otros minutos y listo.
Retira la corteza de limón y la ramita de canela, sirve en tarrinas individuales y conserva en la nevera.
Y ahora el toque asturiano…
Al momento de servir, espolvorea abundante azúcar en cada tarrina, y con un soplete o quemador, quema cuidadosamente para formar un caramelo dorado y crujiente. Tómalo enseguida.
Esto de verdad que marca la diferencia, nunca más en la vida probaré el arroz con leche de otra manera… tiene que ser requemau! 😀